Esta ruta es una de mis preferidas por la variedad de habilidades que requiere, por sus impresionantes vistas y porque para muchos de los que somos madrileños, esta zona de la Sierra de Guadarrama ha representado desde la niñez el corazón mismo del Parque Nacional de Guadarrama.
Sabido es que el apelativo de dragón para esta Sierra fue usado desde la Edad Media, en las Crónicas en referencia clara a la espalda de un dragón que tiene esta cresta de Siete Picos. Pero no debemos menospreciar todo el interés suscitado en los habitantes madrileños por entender el montañismo como una actividad deportiva, saludable y lúdica, en absoluto falta de interés cultural. Así podemos referirnos a los fundadores del alpinismo madrileño por los nombres de las sendas que recorren ésta ruta circular: Herreros-Galilea y Eduard Schmid.
Nombres evocadores de fuentes no faltan como la de Los Acebos, ni de sendas como la de Los Alevines, ni de instalaciones para la práctica del esquí que tomaron el nombre del Puerto de Navacerrada, originario de los Neveros de La Condesa y que abrió el paso al Palacio de La Granja, para mayor comodidad de la Corte.
En resumen, una ruta hermosísima que todo el que pueda o quiera debería disfrutar.
Encuentro: Parking Puerto de Navacerrada
Duración 5 h
Recorrido 11 Km
Desnivel 600 m
Tipo de ruta Circular
Dificultad Media – Alta
Época Todo el año
Salida Parking del Puerto de Navacerrada
Equipo Botas de montaña, ropa de abrigo, abundante agua, crema solar. En invierno nieve en buena parte del recorrido.